Viajeros 175. Edición de Invierno 2015

Nuestra primera reflexión del año la queremos hacer en torno a la tecnología en general y aplicada al sector de viajes en particular. El desarrollo en este campo ha sido tan rápido y tan extenso que ha llegado un momento en el que es imposible concebir una vida normal sin portar varios dispositivos y las últimas apps. Indudablemente, un smartphone o una tablet pue-den hacernos la vida más sencilla y ligera a la hora de viajar (sustituyen a gps, cámaras, pesadas guías impresas, ordenador, etc). Cabría pensar que esta ligereza de equipaje nos aporta mayor disfrute de los destinos pero, en muchos casos, proporciona todo lo contrario: estrés por com-partirlo todo instantáneamente en redes sociales, ver los destinos a través de una pantalla (la del móvil o la cámara) y perder la oportunidad de interactuar con la población local que se visita. Dicho todo esto, os sugerimos que hagáis un ejercicio de desintoxicación en vuestra próxima escapada: apagad el móvil, hablad con quienes os encontréis en el lugar elegido, leed literatura de viajes (en papel) y recordad las sensaciones con las que disfrutábais diez años atrás. Nos en-cantaría que nos contáseis vuestra experiencia tanto si es satisfactoria como si no.
Podéis hacer este experimento en alguno de los destinos que os sugerimos en este número, con propuestas como: buscar la esencia vasca en Gipuzkoa, la presencia de Unamuno en Fuerteventura, la diversión desenfrenada en Andorra, los destinos de la Expo 2015 en Italia y la obra de Soulages en Francia. En algunos más lejanos puede resultar todavía más sencillo debido a la mala cobertura. De esta manera, podréis centraros sin problemas en la provincia de Quebec, en Lima y la Amazonia de Perú y en Egipto. Por lo demás, también encontraréis en este ViajeroS Invierno todas las secciones habituales, con temas como el chocolate (Gastronomía) para comenzar 2015 con buen sabor de boca.
Esperamos vuestros comentarios a la vuelta de las “escapadas analógicas” en cualquiera de las redes sociales en las que tenemos presencia. ¡Felices viajes!