CVNE y su compromiso con el Medio Ambiente

Entre estas acciones, cabe destacar que la bodega ha reducido el peso de sus botellas en casi un 20%; el cartón que usa para las cajas de vino está producido con material 100% reciclado y las tintas son también respetuosas con el Medio Ambiente; los tapones que utilizan son de corcho, una materia natural cuyo uso protege los bosques de alcornoques; y cuida además de 545 hectáreas de viñedos, lo que repercute positivamente en la conservación de los ecosistemas y absorción de CO2.

Para determinar con exactitud el consumo de energía de la bodega en sus procesos productivos y poder tomar las medidas más adecuadas para reducirlo, la bodega ha calculado tanto la huella de carbono como la huella hídrica de su Cune Crianza, convirtiéndose en la primera bodega española en conseguir esta doble huella.

CVNE no ha dejado de evolucionar, crecer e innovar tanto en sus vinos como en su forma de hacerlos a lo largo de sus más de 140 años de historia. Se trata de una bodega que ha crecido con un profundo respeto a la tradición y, a la vez, ha sabido incorporar la innovación a sus procesos y se ha comprometido con su entorno. 

Cune Ecológico es el primer vino 100% orgánico de Rioja de la bodega. Se trata de un vino fruto de una agricultura 100% sostenible y unas prácticas tradicionales y respetuosas con el medioambiente. Así, los abonos utilizados en su elaboración son totalmente orgánicos y de origen vegetal. Durante el proceso, se evita el uso de cualquier herbicida, pesticida o cualquier otra práctica de cultivo que pueda dañar o modificar el equilibrio natural entre el suelo y el medioambiente.

El resultado es un caldo 100% natural, que nace en variedad tinta, como resultado de la vendimia manual de las uvas autóctonas tempranillo y garnacha. Cune Ecológico está certificado como tal porque cumple escrupulosamente con la normativa que así lo avala durante todo el proceso de su elaboración. De esta forma, a la vendimia extremadamente cuidadosa y manual, le sigue la fermentación alcohólica con levaduras autóctonas y la crianza en barricas de roble que apoyan el cultivo de bosques sostenibles.

Se trata de un caldo rojo rubí con una marcada intensidad aromática de frutos del bosque y con ligeras notas especiadas debido a su crianza en barrica. En boca predomina la fruta del tempranillo y cuenta con un final persistente y equilibrado. Es un vino ideal para acompañar la comida mediterránea: pastas, arroces, quesos y todo tipo de carnes.