Experiencia Gastronómica con el Oro Negro en Cifuentes

Por entrar en situación, anotamos unas pequeñas pinceladas sobre el origen y procedencia de este bien natural tan cotizado, para que se pueda comprender mejor los motivos de su alto coste, derivados de una importante inversión en tiempo, paciencia, cuidados, conocimiento y la constante persecución por alcanzar la máxima calidad.

El micelio del hongo rodea a las raíces más finas del vegetal formando una estructura abultada que se conoce como micorriza. Es ahí donde se realizan los intercambios nutricionales y fisiológicos que benefician a ambos seres. Una vez establecido un equilibrio entre el árbol y el hongo comienza la producción de trufas. Cuando éstas alcanzan la madurez desprenden un fuerte aroma, por lo que se suelen utilizar ciertos animales que logran detectarlas. En el caso de la trufa negra se necesita la ayuda de un perro, compañero indispensable del trufero, que marca y escarba sobre el tesoro localizado.

Nos encontramos en plena temporada de recogida de la trufa negra, que culminará en el mes de febrero, y Trufass Premium nos propone participar en esta experiencia sensorial única, que consiste en vivir en primera persona todo el proceso de búsqueda y recolección de trufas en sus plantaciones de la Alcarria, y así conocer, un poquito más, este tesoro de nuestra gastronomía.

Esta redacción acepta el plan, e iniciamos esta experiencia intentado contener nuestra curiosidad y, con el fin de no perturbar la importante labor del rastreador, conseguimos mantenernos a cierta distancia de este estupendo fichaje con exelente olfato. En silencio observamos como encuentra el rastro de la trufa, atraído por su fuerte aroma, señalando inmediatamente su ubicación. Casi al instante de su extracción podemos percibir este intenso perfume característico que, evidentemente, no podemos trasladar sobre estas líneas, pero si podemos invitaros a descubrirlo por vosotros mismos porque, es como el primer aroma del pan cuando sale del horno o el olor de las páginas de un libro por estrenar, o el café recien hecho, ese olor a nuevo que sólo sucede durante unos momentos y que, aunque en el caso de la trufa perdurará un poco más, nunca lo vas a experimentar de una forma tan pura.

La experiencia nos ofrece también una pequeña degustación sobre el terreno con productos trufados, donde descubrimos la cantidad de platos que podemos realizar con este tesoro. Y claro, es fácil que, después de esta tentación y lo aprendido, os preguntéis, ¿quien regresa ahora a casa con las manos vacías?. Pues será quien se resista a no llevarse alguna de esas mismas trufas que acabamos de recolectar y que, este gran equipo de expertos truferos que hoy nos acompaña, ofrece a los participantes de la experiencia a un precio que no está en el mercado. Nos sentimos aliviados al comprobar que no fuimos los únicos en caer en esta doble tentación... 

Pero aún no termina la jornada. Descubrimos también a Natalia Díaz, una excelente "narradora de historias" que nos aportó mucho durante toda la experiencia y que os contará el bonito y sorprendente pueblo de Cifuentes como si lo estuviera viviendo siglos atrás. Con ese talento único que tienen ciertas personas para transportarte sobre sus palabras de una forma brillante.

Hemos aprendido mucho sobre el origen y recolección de la trufa, pero también sobre como elaborar productos trufados, como aceite, huevos, queso,... y la variedad de platos que se pueden cocinar con trufa, que son muchos más de los que puedes imaginar y de los que nosotros conocíamos. Todos apetecibles.

Estamos en una zona donde se respira este tesoro, el día está siendo estupendo y es la hora de comer, aprovechemos la ubicación y la recomendación de estos expertos truferos eligiendo uno de los restaurantes locales, poniendo así la guinda a una jornada de lujo.

Ubicados en Cifuentes se encuentran los restaurantes Soraya y La Esquinita, y en Masegoso de Tajuña, el restaurante Las Vegas. En cualquiera de ellos podremos degustar estas creaciones con productos únicos.

¡Bon Appetit!