El alojamiento, inaugurado en 1990 por el Comandante en Jefe, Fidel Castro Ruz, y Gabriel Escarrer, Presidente de Meliá Hotels International, marcó un antes y un después para el turismo en la isla, justo cuando Cuba se abría definitivamente al mercado turístico global.
La instalación se levantara a orillas de la playa María Aguilar, en el litoral sur, y contara con 400 habitaciones, lo que posibilitara disponer de una mayor oferta de alojamiento de alto estándar en la ciudad Patrimonio de la Humanidad. El nuevo hotel es propiedad de la Empresa Mixta Toscuba
El edificio se ha diseñado con tres niveles de altura y contará con una exclusiva planta The Level. Dispondrá de modernas habitaciones, amplias áreas de piscina y excepcionales propuestas en restauración y recreación tanto para adultos como para familias. Gimnasio, circuitos húmedos y varios salones de masaje completarán la oferta de esparcimiento. Contará, también, con servicios y áreas exclusivas para la realización de eventos y convenciones.